
La Caspa
La caspa, pityriasis simplex capillitii o furfurácea, es una afección común del cuero cabelludo en la cual pequeños trozos de piel seca se desprenden de la piel, y esto frecuentemente es acompañado de picor pero sin inflamación. Es normal que las células de piel mueran y formen hojuelas, pero en algunas personas, ya sea crónicamente o como resultado de ciertas dolencias, experimentan una cantidad anormal de estas, lo cual suele ser acompañado de prurito, enrojecimiento e irritación. La caspa también puede ser un síntoma de la seborrea, psoriasis, micosis o pediculosis.
La caspa, que afecta solo la piel del cuero cabelludo, no causa el adelgazamiento o la pérdida del cabello.
La caspa es más probable que aparezca en la adolescencia hasta la edad madura, aunque puede ser de por vida. Afecta más a los hombres que a las mujeres, posiblemente por causas relacionadas con las hormonas.
En las personas sin caspa las células de la piel pueden morir y ser reemplazadas aproximadamente cada mes, pero en las personas con caspa este recambio ocurre una vez cada dos semanas. El resultado es que las células muertas caen en bloques grandes que aparecen como pequeños trozos o manchas grisáceas en el cuero cabelludo.
La caspa no es es causada por higiene deficiente. Aunque el uso infrecuente de champú puede hacer la caspa más evidente.
La causa más común de la caspa es el hongo Pityrosporum ovale (una de las variantes del genus hongo Malassezia). Este hongo se encuentra naturalmente en la superficie de la piel tanto de personas saludables como de aquellos con caspa. El hongo metaboliza la grasa humana, resultando en un producto secundario que es anti higiénico e irritante. Cuando el hongo Pityrosporum ovale crece demasiado rápido, la renovación natural de las células resulta afectada y aparece la picazón.
La caspa leve puede ser causada por:
- Glándulas sebáceas sobrerreactivas
- Alergias a alimentos
- Transpiración excesiva
- El uso de jabones alcalinos
- Micosis
- Estrés
Personas con dermatitis seborreica, psoriasis, eczema, higiene y cuidados del cabello pobres, que usan champús en exceso, los que padecen Tinea capitis, una infección fúngica, también conocida como la tiña del cuero cabelludo, y enfermedad de Parkinson tienden a padecer caspa mucho más frecuentemente que la población en general.
Un estudio encontró que entre el 30 y el 83 por ciento de las personas con VIH tienen dermatitis seborreica, en comparación con 3 a 5 por ciento en la población general. Pacientes que se someten a tratamientos inmunosupresores también tienen riesgo.
No consumir suficientes alimentos que contengan zinc, vitaminas del complejo B, y algunos tipos de grasas puede aumentar el riesgo de padecer caspa.
Los inviernos fríos y secos pueden originar caspa o empeorarla, al igual que la exposición al polvo, la luz ultravioleta, champús demasiado fuertes y tintes para el cabello, y en algunos casos excepcionales, la caspa puede ser causada por el uso excesivo de gel o aerosol fijador.
El minoxidil, que se usa para tratar el adelgazamiento de cabello, puede causar la caspa, agravar la descamación como un efecto secundario. El alcohol en el minoxidil puede secar el cuero cabelludo, y después de unos meses de tratamiento, la caspa puede darse.
La forma más efectiva para tratar y controlar la caspa es usar champú anticaspa. Los champús más populares actualmente contienen ketoconazol, que es antifúngico. Otros también muy populares contienen sulfuro de selenio, que reducen la producción de aceites naturales de las glándulas del cuero cabelludo. Los champús que contiene zinc piritiona ralentizan el crecimiento del hongo.
Los que contienen alquitrán de hulla poseen un agente anti-hongos naturales, pero estos pueden manchar el cabello teñido o pueden por el uso a largo plazo y pueden hacer al cuero cabelludo más sensible a la luz solar, por lo que los usuarios deben usar sombrero cuando fuera. El alquitrán de hulla también pueden ser cancerígeno en altas dosis. Los productos para el cabello que contienen ácido salicílico pueden ayudar al cuero cabelludo a deshacerse de las células de la piel, aunque no ralentizan la reproducción de las células. Muchos “scrubs” contienen ácido salicílico, y a veces el uso de estos productos pueden dejar el cuero cabelludo seco y provocar una descamación peor en piel.
Los productos para el cabello que contienen aceite de árbol de té, derivados del árbol del té australiano (Melaleuca alternifolia) durante mucho tiempo se han utilizado como anti-hongos, un antibiótico y un antiséptico. Algunas personas son alérgicas a este aceite y no deben usarlo.
Si la caspa no desaparece después de usar un champú anti-caspa, deberá consultar a un dermatólogo certificado. Un dermatólogo puede diagnosticar correctamente su condición y recomendar un plan de tratamiento que mejor se adapte a sus necesidades.